http://www.elcomerciodigital.com/20110117/mas-actualidad/politica/comite-201101172218.html#opina
Cuando el nerviosismo apremia, o cuando la desconfianza acecha, o cuando el revés se presume, o cuando se siente cierta inferioridad o cuando se tienen remordimientos de conciencia...
Cuando se está en cualquiera de esos estados, se finge que no pasa nada y se rie histéricamente. Pero, la madre superiora llega mañana a Asturias, en su primera visita en años, para generar apoyos y confianza. Hay que aparentar y que no cunda el desánimo.
MEDIOCRES.
Se diga lo que se diga, al final todo quedará JUZGADO por el voto en las elecciones. Ahí se verá quién tiene razón y quién no.
ResponderEliminarEl voto no siempre tiene razón. Mira Hitler :)
ResponderEliminarAl final va a ser que el objetivo de un partido NO es conseguir convencer a la gente para que vote tu proyecto. Dentro de una reglas democráticas (supervisadas por las Juntas Electorales...).
ResponderEliminarLos partidos utilizan a los votantes en exclusivo beneficio. Esto es como las operaradoras de telefonia. Si solo hay dos, te manejan y te llevan por donde quieren. Si hay 10, te cuidan, te respetan y valoran más que nuna lo que te ofrecen. Aqui vivimos con la orquesta bipartidista que en el caso de Asturias es demencial. Ha tenido que venir Cascos a decir cuatro cosas bien dichas, para que todo el mundo despierte. Incluso Cospedal, que parece ahora tirar de asturianismos y de compromisos de visitar y de preocuparse por Asturias.
ResponderEliminarCada uno es muy libre de votar lo que le venga en gana, desde luego. Y en mi caso, he descubierto y más que nunca, que las grandes personalidades políticas están por encima de los partidos políticos. Un tipo como Cascos, por dignidad y por venganza es capaz de poner a trabajar hasta al más vago.
Lo más importante es el proyecto. Todo lo demás añade y bienvenido sea. El objetivo es conseguir votos (a corto, medio o largo plazo). Todo proyecto que no cuaja (votos) tiende a desaparecer. Me parece obvio.
ResponderEliminarYo lo veo así. El problema es cuando no tienes proyecto y tienes un enorme partido detrás. Y entonces el proyecto lo elaboras alrededor de las palabras de un ex. Eso para mi, y en el caso de Asturias, lo dice todo.
ResponderEliminarEl proyecto efectivamente lo es todo. El problema también viene de quien te gestione dicho proyecto. Si es un político de partido, todo proyecto estará determinado por la voluntad del partido que no de los ciudadanos que votaron. Ese es el problema. Que cuando el partido manda, y la voluntad del político es exclusivamente partidista, la necesidad o la realidad tiende a amoldarse a una disciplina alejada de lo que piensa el ciudadano. Véase PP o PSOE. Cuando sin embargo uno de esos eslabones se rebela, y mete el dedo en la herida, la gente se identifica de nuevo con el político. Y entonces es cuando se premia la rebeldía, la gestión, que aunque esté creandose y en fase de nacimiento, tiene el sello de compromiso. Los grandes partidos políticos funcionan como regímenes. Por eso detestan las bisagras, porque les obliga a comportarse más allá de la disciplina de partido.Malo para el partido. Bueno para el ciudadano.
Siempre y cuando eso de "... la gente se identifica...", "... se premia..." se traduzca en votos; sino nah de nah...
ResponderEliminarEspero que se traduzca. Y si no se traduce, pues a dedicarse a otros menesteres. En el caso de Cascos, votos tiene y tendrá, estoy seguro. Y ellos, los del PP, también lo saben. Mira que pronto han movilizado a la Cospedal por aquí.Y mira que sonrisa histerica y forzada de oreja a oreja esgrimen en cada rueda de prensa. Su felicidad forzada es mi felicidad asentada. Tendrá votos Cascos para ganar por mayoría las elecciones?? pues seguramente no. Para condicionar la política asturiana?? estoy seguro de que sí. Mi opinión es que eso será una ventaja enorme para Asturias.
ResponderEliminarDe todas formas que se presente definitivamente Cascos depende dos cosas: MEDIOS Y EQUIPO SUFICIENTE.
Y su compromiso con Asturias es bastante honesto. Sabe que si no tiene esos dos condicionantes no podrá ofrecer buena gestión y alternativa. Y si no puede ofrecer buena gestión, no se presentará. El tiempo y los apoyos que pueda tener son decisivos.