La Noria

No le voy a descubrir al personal lo repugnante y asqueroso que es ese programa de Telecinco, sensacionalista hasta la arcada, y que dirige Jordi González, adalid del progresismo más radical y comprensivo siempre con lo malo.

La historia de este esperpento televisivo está llena de episodios humillantes con el sentido más ético. Desde ridiculizar a las víctimas de ETA, dar comprensión al maltratador de Antonio Puerta y presentarlo como víctima, después de comprobar las ideas políticas que la víctima, el profesor Neira, tenía. Y ahora, buscar el morbo y la comprensión de la madre de "el cuco", individuo participante en la muerte de una joven sevillana.

La noria y su presentador, en su afán morbistico y radicalmente progre de defensa o entendimiento de "todo lo malo", buscó una nueva vuelta de tuerca dejando el espacio abierto para que la madre del ejemplar defendiera a su retoño.

Tras esta emisión, importantes anunciantes publicitarios decidieron dejar de publicitar el programa. Tampoco importa, otros vendrán a suplirlos. Al fin y al cabo, el morbo y la indecencia es lo suficientemente atractivo en un país como este, como para que un impresentable presentador de un impresentable programa de una impresentable cadena de televisión sigan haciendo lo que saben, que no es otra cosa que la de enmierdar la caja tonta hasta capacidades neuronales muy pero que muy bajas.

Qué asco de gentuza.