Rabietas y consecuencias

Una decisión arbitral volvió a dejar sin emoción la vuelta de las semifinales.El gol de Higuain, anulado por previa supuesta falta de Ronaldo tuvo que haber subido al marcador y de nuevo, de manera una tanto inexplicable, no subió al marcador. A eso se agarra el Madrid de Mourinho para decir que les han robado. Aunque en conjunto, si analizamos el partido, ni Carvalho ni Adebayor tuvieron que terminar el partido. Aunque tampoco lo tuvo que terminar ni Busquets ni Pedro.

Sin tener en cuenta estos importantes detalles, hay que decir que el Madrid no tiró ni una sola vez a puerta, no tuvo ni una sola ocasión a parte de esa y la del gol. Con ese bagaje dificil será remontarle el partido. Pero Mou se agarra a la polémica, porque su curriculum se vió sacudido por la eliminación. No es que el barcelona demostrase una superioridad letal. El Barça movió el balón con ese criterio tan suyo y esa perfección tan desesperante para quien corre detrás, pero tampoco se puede decir que esté en su mejor momento de forma.. Y el Madrid se dedicó casi en los cuatro partidos a contener el vendaval y esperar la contra.Plantemiento táctico de un equipo menor, que no hace justicia a los millones de euros en fichajes y salarios que tiene el equipo. Repito que para eso no hubieran fichado a Mourinho. Con haber traido a Preciado, era suficiente.

Polémicas a un lado, en las que la razón la tiene el Madrid, aunque no sé si hasta el punto de valorar conspiraciones en la UEFA y demás, la verdad es que los cuatro partidos nos dejan unas consecuencias malas para la selección española. Los jugadores del Madrid y del Barcelona no se hablan. Y ese mal rollo si se traslada a la selección puede terminar también con los éxitos futboleros del equipo nacional.