Alguien me había dicho que Ben Affleck prometía como director. Personalmente tenía mis dudas, y sigo teniendolas después de ver la película "Town, ciudad de los ladrones".
Hombre, alguien que sigue la estela de Michael Mann lo que demuestra es desde luego ganas de hacer buen cine. Y eso es un punto a favor. Otra cosa es dedicarse a imitar descaradamente al ídolo. En este caso tenemos una película que es una clarísima inmitación de la soberbia "Heat", variada solamente en ciertos recursos escénicos.
Affleck como actor es bastante deficiente. Quizás anclado en comedias románticas puede tener su baño de multitudes, pero cuando se decide por adentrarse interpretativamente en cosas mayores se le ven las limitaciones.
La película tiene varios fallos a mi juicio. La primera es que el actor principal es el director. La segunda que es una historia casi clavada pero matizada de la obra de Michael Mann y la tercera es esa empalagosa secuela romántica que arrastra Affleck y que le puede condicionar en un futuro a la hora de encontrar credibilidad a su carrera como director.
Vamos a darle un tiempo de todas formas para ver si el hombre perfila el fondo, y mejora sus intenciones.
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